Un reciente estudio ya había señalado que existía una relación entre el consumo de yogur y una mejor calidad de la dieta y un perfil metabólico más sano, pero no en los niños. Y este es el principal objetivo del estudio llevado a cabo por la Universidad de Iowa, basándose en los datos de la Encuesta Nacional de Examen de Salud y Nutrición (NHANES) de 5124 niños (de 2 a 18 años) entre 2003 y 2006 en Estados Unidos. La calidad nutricional de la dieta fue evaluada utilizando el Índice de Alimentación Saludable 2005 (HEI-2005), y los perfiles metabólicos se obtuvieron de los datos de laboratorio de la encuesta NHANES.
Como mínimo una ración de yogur a la semana
El estudio reveló que solo el 33,1 % de los niños consumía yogur al menos una vez a la semana (consumidores frecuentes). Los investigadores hallaron que estos presentaban una mejor calidad de la dieta, un menor nivel de insulina en ayunas, una menor resistencia a la insulina y un mayor índice de sensibilidad a la insulina, comparados con los que consumían yogur con menos frecuencia. Asimismo, los consumidores habituales obtuvieron una mayor puntuación total en el HEI-2005. Sin embargo, no se observó que el consumo de yogur estuviera asociado con el peso corporal, la glucosa en ayunas, los perfiles lípidos de suero, la proteína C reactiva y la tensión arterial.